Calaima, es una alternativa para quienes aman la cultura y desean dar a conocer sus propias manifestaciones, sin ningún tipo de discriminación política, religiosa o de cualquier otra índole. Nos interesa ante todo mostrar lo que la gente hace, en campos como la pintura, el teatro, la poesía, las artesanías, las microempresas y llevar en cada entrega una cajita mágica llena de mensajes, para que nuestros lectores puedan enriquecer sus conocimientos y abrirse paso por los amplios recodos de la cultura local, regional, nacional y mundial. No queremos pasar de periodistas, ni más faltaba, pero sí, presentar un material ameno e interesante, que contribuya al enriquecimiento del bagaje cultural de quienes tengan acceso a él, con el único anhelo de servirle a los amantes de las cosas buenas, entre los que encontramos a los maestros, estudiantes y padres de familia entre tantos y tantos intelectuales que buscan en la lectura, una manera sana de distraerse y de aprender mientras juegan con la imaginación y la chispa creativa de quienes de alguna manera llevamos dentro el compromiso de cultivar el conocimiento, en los terrenos fértiles de las mentes que desean iluminarse con la sabiduría al ritmo de los tiempos.

Calaima, nace con el compromiso de llegar a las aulas de las Instituciones Educativas, a los hogares, a las Casas de la Cultura, a las tertulias culturales, a los talleres literarios, sin respetar fronteras, porque viajará a través de la Geografía Patria, en busca de un lugar para detenerse y dejar su esencia. Aquí, nuestros lectores podrán publicar sus artículos que tengan siempre relación con la cultura, la ciencia, la tecnología, comenzando por los maestros y estudiantes. Será la tribuna de los poetas, la ventana multicolor de los pintores y la voz del labriego que quiere dar a conocer sus manifestaciones, seguramente con el sabor de pasados lejanos, que deben volver a hacer parte de la charla familiar y del ambiente rural que un día caminó por las rutas perdidas del olvido hasta desaparecer de las mentes de las nuevas generaciones.

Calaima, quiere ser la voz de todos, sin excepción, porque comprende a la perfección, que la cultura no tiene credo ni color político determinados, que no es la manifestación de unos y la negación de otros. Calaima sabe que en su quehacer no cabe la discriminación, por el contrario, comprende sin ambigüedades que se engendró y nació, solamente por amor, por amor a Nocaima, a esta tierra que ha visto florecer sus esperanzas a la luz del aliento tibio de sus ancestros y del sentir colectivo de una raza que se enorgullece de ser Nocaimera.


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